Volar por los aires

Jimmy Dove trabaja en la unidad antibombas de Boston, pero decide dejar atrás la tensión del oficio para rehacer su vida. Cuando su antiguo compañero muere en una explosión, lo que debía ser un retiro tranquilo se transforma en un regreso forzado a un mundo de peligro y cuentas pendientes. La película captura la mezcla de adrenalina y culpa que persigue a alguien acostumbrado a jugar con el tiempo y la muerte.

Pronto Dove sospecha que la bomba que mató a su compañero no fue obra del azar: las pistas apuntan a un artesano de explosivos que parece conocerlo demasiado bien. Lo que empieza como una investigación profesional se convierte en un duelo personal, un juego del ratón y el gato en el que cada movimiento puede ser letal. La tensión se mantiene con escenas de alto riesgo, trampas ingeniosas y la constante sensación de que el enemigo siempre va un paso por delante.

El clímax enfrenta a Dove con sus propios demonios y con la necesidad de proteger a inocentes mientras intenta detener a un adversario obsesionado. La película mezcla suspense, acción y drama humano, explorando temas de lealtad, responsabilidad y redención en un Boston oscuro y amenazante. En definitiva, es un thriller que no sólo explota en lo físico, sino en las consecuencias morales de quienes manejan el poder de destruir.