Un documental que mezcla el relato de un crimen real con la tensión de un thriller de espionaje, investigando el asesinato de Kim Jong-nam, hermano del líder norcoreano. A través de imágenes de vigilancia, entrevistas y escenas de juicio en Malasia, la película sigue el proceso judicial de las dos mujeres acusadas —presentadas como peones en una red mucho más amplia— y reconstruye cómo se tejieron las pruebas, las coacciones y las contradicciones que rodearon el caso.
La cinta explora las implicaciones políticas y humanas del crimen, cuestionando hasta qué punto las acusadas fueron manipuladas por manejadores anónimos y hasta qué punto el espectáculo mediático influyó en la percepción pública y en la justicia. Con un ritmo que alterna investigación forense y testimonios íntimos, obliga al espectador a reconsiderar nociones de culpabilidad, responsabilidad y el alcance del poder en un escenario internacional.