Un año después de la muerte de su padre en los atentados del 11 de septiembre, Oskar, un niño inquieto y de imaginación desbordante, encuentra una llave misteriosa entre las pertenencias de su padre. Convencido de que se la dejó a propósito, emprende una búsqueda por la ciudad en busca de la cerradura que encaje, transformando su dolor en una misión que le obliga a mirar más allá del duelo.
En su recorrido por Nueva York, Oskar conoce a una serie de personajes insólitos cuyas historias le abren nuevas formas de entender la pérdida, la soledad y la compasión. La película mezcla ternura y melancolía para narrar un viaje de crecimiento y redención, en el que la curiosidad y la conexión humana se convierten en la llave para encontrar sentido y paz.