León, un padre atribulado, lleva a su hijo de acampada a los remotos montes Apalaches en un intento por recomponer su relación. Lo que debía ser una escapada familiar choca con una comunidad cerrada donde una secta local parece haber despertado a un siniestro ente conocido como el Hangman. Cuando el niño desaparece sin rastro, la naturaleza idílica se transforma en un laberinto de símbolos rituales, senderos húmedos y secretos que se niegan a permanecer enterrados.
Obligado a enfrentarse a su propio pasado y a la creciente violencia, León se adentra en una pesadilla en la que los cadáveres se acumulan y la frontera entre superstición y realidad se desdibuja. La película combina suspense sobrenatural y horror rural con una historia sobre culpa, redención y el instinto paternal, en una carrera contrarreloj donde la cordura y la supervivencia se ponen a prueba frente a una fuerza que se alimenta del miedo.